JUEGOS DE AGUINALDOS



ESTATUA: lo juegan dos personas, y cuando una de las dos le dice "estatua" a la otra, la persona tiene que quedarse quieta. Sí se mueve, perderá.

EL GRITO A LA MADRUGADA: consiste en levantarse y pegar un grito a la madrugada. El que no lo haga pierde la apuesta (ideal para paseos). Por ese juego, como recordaron algunos viejitos, del 16 al 24 de diciembre casi nadie dormía.

PAJITA EN BOCA: se juega entre dos personas. Cuando una le diga a la otra "pajita en boca", ésta debe tener una pajita (o un pedacito de papel, algo) en su boca. Si no, perderá y debe pagar la apuesta que hayan hecho.

EL SÍ Y EL NO: también se juega entre dos personas, donde una elige el "sí" y la otra el "no". Cuándo una de las dos haga una pregunta -sea la que sea, y entre más absurda o disparatada, mejor- la otra podrá contestar todo menos la palabra sí o no, de acuerdo con la respuesta que haya escogido. Sí se equivoca, pierde. Y también se puede hacer al contrario: que la persona que eligió el "sí" a todo responda afirmativamente, e la del "no", otro tanto.

CON SU PERMISO: se trata de siempre utilizar la expresión "con su permiso", cuando alguna de las personas que esté jugando se dirija a caulquiera de las otras involucradas en la apuesta. Sí se le olvida, pierde el juego y debe pagar los aguinaldos.

EL TRES PIES: es uno de los juegos más divertidos. Los que juegan, cada vez que uno vea al otro con los dos pies separados, se le acerca y le mete el pie en medio de los suyos y grita "tres pies". Gana y tendrá derecho a cobrar los aguinaldos apostados.

EL BESO ROBADO: esta apuesta se hace entre dos personas, donde una deberá hacer todo lo posible por darle un beso a la otra, pero un beso robado, para poder ganar. El que logre dar ese beso, gana la apuesta.

SE ME ANTOJA: juegan dos personas donde siempre una le debe decir a la otra "se me antoja". Por ejemplo, "se me antoja" que se siente encima de la mesa, y la otra deberá hacerlo o si no perderá la apuesta.

DAR Y NO RECIBIR: el jugador no puede recibir nada de las manos del otro, si lo hace debe pagar la apuesta o hacer la penitencia acordada.

HABLAR Y NO CONTESTAR: aunque muchas parejas parecen vivir en estas todo el año, la verdad es que es uno de los aguinaldos más conocidos de Navidad. El jugador no puede contestar a ninguna de las preguntas que haga el otro, si lo hace debe cancelar lo apostado, aunque el otro le debe cantar antes el "mis aguinaldos".

LAS CUCLILLAS: se reúnen un grupo de personas a jugar, ninguno pude dejarse tocar porque, de lo contrario, le toca ponerse en cuclillas, es decir, agachado, mientras los demás le cobran a gritos "mis aguinaldos".

EL BLANCO Y NEGRO: dos personas juegan, donde una afirma que una cosa es blanca (o negra, según el color elegido), mientras la otra la refuta diciendo que es de otro color. Si le da la razón, pierde.

LA PALMADA: los que participan no pueden dejarse dar dar una palmada en la espalda por alguno de los contrincantes. Si se la dan, debe pagar los aguinaldos.

Ir a página principal